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Desbordados por otro lleno de no hay billetes que sobrepasa la hora de los feriantes que apuran las copas y hace que veamos el paseíllo en pie.
Desbordados por una corrida de toros, por fin una corrida de toros, variada de presentación, edades y juego, pero con emoción y tres toros de triunfo grande.
Desbordados porque El Juli cae herido en su primero. Quizás este ha sido el lunar de la corrida. Manseaba y se defendía pero el torero estaba enseñándolo a meter la cara cuando en un derrote certero lo hirió. Por la cara demudada que tenía al levantarse y por las prisas de un subalterno en querer hacerle un torniquete, se sabía que la cornada era grave. El Juli que era la principal atracción de lo que quedaba de feria, Miuras incluidos, quedaba fuera de la misma.
Una pena lo de Antonio Narazé, al que le ha tocado un lote de triunfo importante y sólo se ha quedado en triunfo. Su primero era noble e iba de largo y no le sacó todo lo que debía. Su segundo, el que le hubiera tocado a El Juli, fue otro gran toro, bravo y con transmisión que toreó bien, sobre todo por el lado izquierdo y mató de una buena estocada. Su tercero también fue un buen toro, con poca fuerza, y con el que no pudo rematar la tarde.
Precavido Manzanares con un su primer toro. Un sobrero muy ofensivo de pitones que recibió dos buenos puyazos y con el que puso distancias hasta que el toro se rajó descaradamente. Con su segundo sí vimos al Manzanares de siempre con otro buen toro, que entendió bien y mató mejor. En este quinto Trujillo volvió a estar soberano con los palos.
Desbordado el público que ha pedido orejas de forma desmesurada, y desbordada también la presidencia. Nunca he sido de criticar esta o aquella oreja, pero el listón en Sevilla se está poniendo demasiado bajo. Si a Nazaré le dan dos orejas, cuando algunos pensábamos que con una estaba bien, a Manzanares no se le ha medido con el mismo rasero, y conste que con una estaba bien recompensado.
Aunque con la pena de la cogida de El Juli, al que deseamos una pronta y completa recuperación, al final hemos salido contentos porque la tarde ha sido muy entretenida en todos sus toros y esta vez no ha pesado su larga duración. Pena de corrida de Miura que se queda sin El Juli, con la ilusión que teníamos.
